'Una historia de amor'

By Rocio Granados - La Voz Catolica

Photography: ROCIO GRANADOS | LVC

MIAMI | Para Angélica Rodríguez y Philip Fazzarella asistir a Camino del Matrimonio, el programa de preparación pre matrimonial de dos días “ha sido una experiencia muy bonita”.

Se van a casar dentro de unos meses en Colombia, de donde ella es originaria. Sus expectativas antes de asistir al retiro, que es un requisito para el matrimonio por la Iglesia Católica, eran diferentes, dijo Rodríguez, pero al escuchar los testimonios de las diferentes parejas “empiezas a reflexionar sobre cosas que antes no te habías preguntado”.

Sus “historias de amor y de sufrimiento. Cómo consiguieron levantarse y seguir adelante y cómo tener un matrimonio lindo, eso nos impresionó bastante”, dijo Fazzarella, de origen brasileño, junto a su novia el 6 de mayo, el día de la clausura del Camino número 861 que marco el 45 aniversario del programa pre matrimonial en la Arquidiócesis de Miami.

“La historia de Camino, es una historia de amor”, dijo el P. Manny Álvarez, párroco de la iglesia Immaculate Conception, en Hialeah, durante la Misa con los novios que asistieron al retiro y sus padres y algunas de las parejas fundadoras del movimiento, en el Instituto de la Pastoral Hispana del Sureste, SEPI, en Miami.

Recordó que él es hijo de dos caminantes que pasaron el Camino número 2 y creció con los hijos de ese grupito “que empezó a hacer una revolución acá en la Arquidiócesis”.

“Sin camino no hay esta revolución de amor. Sin estos pioneros yo no existiría, mi sacerdocio no existiría”, dijo el P. Álvarez.

El P. Alvarez es el primer sacerdote hijo de caminantes, el segundo, el P. Matthew Gómez, se ordenará este 12 de mayo.

Dijo además que “el matrimonio es el orgullo de la Iglesia” y “si no tienen a Dios en el centro de sus vidas, no hay amor auténtico”, ya que el matrimonio tiene que ser “una entrega total, el uno al otro y los dos a Cristo”.

Y  Camino existe “para ayudarlos a tener un matrimonio que dure para toda la vida, no hasta que se aburran”, agregó.

Por 45 años cientos de parejas casadas, que son parte de Camino del Matrimonio, han compartido las experiencias de sus matrimonios con más de 25 mil parejas jóvenes hispanas, que deseando casarse por la Iglesia Católica, han pasado por Camino, ayudándolas así a prepararse para las realidades de la vida matrimonial.

“Aquí se dicen las cosas como son”, dijo Jorge Álvarez, voluntario de Camino hace 30 años. “No le dicen a nadie que te vas a encontrar un paraíso en tu matrimonio. Les dicen que tú puedes estar como yo, 55 años de casado con la misma mujer, y puedes decir que todos los días hay que trabajar en el matrimonio, todos los días son distintos, todas las situaciones son diferentes”.

Álvarez llegó a Camino por una invitación y desde entonces, junto a su esposa Estrella orientan y ayudan a las parejas como auxiliares en las mesas de trabajo. Pertenecer a Camino dice le ha ayudado también en su propio matrimonio y a creer más en esta institución.

Según las estadísticas de Camino, solo el 4 por ciento de las parejas que pasan este curso pre matrimonial llegan a un divorcio, comparado con el 25 por ciento de las parejas que no lo pasan.

“La idea principal es que no haya divorcios, que se lleven el mensaje y puedan lograr ser felices” dijo Pedro (Papucho) Peláez, quien junto con su esposa Martha (Mamucha) son una de las primeras parejas fundadoras del programa.

Actualmente, aunque las estadísticas señalan que cada vez más jóvenes deciden no casarse en los Estados Unidos, en cada retiro de Camino del Matrimonio, que se realiza aprox. una vez al mes, “hay un promedio de 40 parejas”, dijo Papucho.

Incluso en el programa Matrimonio 2000, que es para las parejas que ya tienen años de casados por lo civil, pero quieren casarse por la iglesia Católica, ya han pasado más de 3000 parejas, desde el año 2000 cuando se fundó.

Camino es un retiro de preparación para el matrimonio de dos días sábado y domingo, dirigido a jóvenes que se van a casar por primera vez. Es uno de los varios programas de preparación matrimonial que ofrece la Arquidiócesis, junto con Pre-Cana en español y en inglés y “Transformed in Love”, en inglés.

La asistencia a uno de estos programas de preparación es uno de los requisitos para recibir el sacramento del matrimonio en la Arquidiócesis.

Los Caminantes, como se llaman a los que pasan este retiro reciben charlas sobre la psicología del matrimonio, el significado de los sacramentos, la economía del hogar, la planificación familiar y desde 1989 se ha incluido a los padres de los novios, para que también reciban charlas los domingos por la tarde. El programa termina con la Misa todos juntos.

Desde sus inicios se han hecho revisiones de los temas que se tratan, pero el cambio más grande ha sido el uso de la tecnología en sus presentaciones. Y por petición del Arzobispo Thomas Wenski, hace un año aproximadamente se están haciendo Caminos en inglés. Al año se realizan 18 Caminos, 9 en español y 9 en inglés.

El Camino en inglés “es una traducción del español”, dijo Peláez. Las charlas son las mismas sólo está dirigido a los novios que no hablan español.

Su historia

Camino surgió en 1973 al ver a muchas parejas de novios que estaban por casarse y no tenían idea de lo que era el matrimonio, dijo Alfredo Jacomino, quien tuvo la inquietud de hacer algo por estas parejas. Él ya estaba casado y  pertenecía a Cursillos de Cristiandad.

En esa época sólo existía el programa Pre-Cana, con el P. Ángel Villaronga, en la parroquia St. John Bosco, pero eran eventos masivos a donde llegaban a asistir unas 300 parejas. Jacomino quería algo más personalizado, con grupos de trabajo como en Cursillos.

Se lo comentó a un grupo de parejas que pertenecían a Cursillos de la parroquia Sts. Peter and Paul y con su párroco, el P. Jorge González y el apoyo de Mons. Agustín Román formaron Camino.

El nombre se lo puso Mamucha. Recuerda Jacomino que estaban reunidos y ella dijo “’hay que darle un nombre, porque esto es como un camino, Camino del Matrimonio’, le dije eso mismo”.

El 5 de mayo de 1973 se realizó el primer retiro “creo que fueron como 8 o 10 parejas y fueron las que cada uno de nosotros llevamos. Yo lleve un primo que se iba a casar por la iglesia”, dijo Jacomino.

“Era un grupo con mucha ilusión, con mucho cariño”, indicó Jacomino.

“Fue muy emocionante porque empezamos de cero”, dijo Emilita Melian, con su esposo René fueron otra pareja fundadora. “Nos reuníamos una vez por semana para ver las charlas que íbamos a dar, como lo íbamos a conducir. Por un largo tiempo éramos los mismos lo que dábamos las charlas”, agregó.

“Alfredito tuvo una idea de crear algo distinto que no existía en ese momento”, dijo Conchita Aguilar, también junto con su esposo Carlos fue una pareja fundadora. “No sabíamos si en realidad era la respuesta a lo que necesitaba la sociedad en aquel momento. Después de 45 años la mano de Dios siempre estuvo allí”, dijo.

Después de realizar los primeros retiros, el programa empezó a hacerse conocido y las parroquias empezaron a enviar parejas hasta hoy.

“Camino les da a las parejas las herramientas para tener un matrimonio feliz y ha servido como un apostolado para aquellos que vienen a ayudar voluntariamente”, dijo Jacomino de 82 años, hace dos perdió a su esposa, Teresita con que estuvo casado 48 años.

En estos 45 años de Camino, “creo que se ha superado las expectaciones. Hoy hay 48 parejas, vienen hasta de Broward”, dijo Jacomino.

“Es una alegría grande, se siente uno muy bien sirviendo mi señora y yo. En Camino se trabaja en pareja siempre, no se trata de dar una charla y ya, se trata de tratar de que de verdad funcione y puedan lograr la felicidad”, dijo Papucho.

Desde su formación los retiros de Camino se han dado en diferentes lugares, empezando en la iglesia Sts. Peter and Paul, en la Catedral St. Mary, en el Seminario St. John Vianney, en la iglesia Our Lady of Perpetual Help, en Opa Locka (cerró en 2009), y los últimos 10 años aproximadamente, se están haciendo en el Instituto de la Pastoral Hispana del Sureste, SEPI, en Miami.

Entre los muchos consejos que les dan a los novios esta “primero que nada el respeto, es lo más importante, aunque nos queramos matar. Después la comunicación, nunca te quedes con algo que no te gusta, hay que decirlo, es muy importante”, dijo Emilita.

PARA SABER MÁS:

Sobre Camino del Matrimonio visite su página web: www.caminodelmatrimonio.org.