By Ana Rodriguez Soto - Florida Catholic newspaper
MIAMI | El P. William Muñiz era un "padre" en todo el sentido de la palabra.
Fue un padre espiritual de las comunidades cristianas de Nicaragua, Texas y el sur de la Florida. Fue padre biológico de tres hijos, abuelo de cinco y esposo por 63 años.
Fotógrafo: FILE
El P. William Muñiz: Nacido el 23 de junio de 1935; ordenado sacerdote católico el 28 de mayo de 1994; fallecido el 31 de julio de 2020.
El P. Muñiz fue un ex sacerdote episcopal que se ordenó para la Arquidiócesis de Miami en 1994 y falleció la noche del 31 de julio de 2020, por complicaciones de COVID-19. Murió en el mismo hospital Holy Cross, en Fort Lauderdale, donde ejerció como capellán hasta el 2012.
El P. Muñiz tenía 85 años y había celebrado su 25 aniversario como sacerdote arquidiocesano el año pasado. Antes de eso, fue sacerdote de la Iglesia Episcopal por 27 años.
"Dio positivo al COVID y desde ahí se fue cuesta abajo", dijo su hijo, William D. Muñiz.
"No estaba enfermo. Era muy ágil, muy entretenido, hacía reír a la gente", dijo el P. Francis Akwue, párroco de la iglesia St. Henry, en Pompano Beach, donde el P. Muñiz comenzó un ministerio para los hispanos en 2015, tres años después de su retiro del sacerdocio.
"La historia de St. Henry no estaría completa sin él, porque él comenzó el trabajo en español aquí, el apostolado para los hispanos", dijo el P. Akwue.
La parroquia estaba planeando comenzar una novena de Misas para el P. Muñiz el 3 de agosto de 2020. "Esperamos que los hispanos llenen la iglesia hoy y muchos días más por venir", señaló el P. Akwue.
"Su llamada (llegó) cuando tenía 30 años", dijo su hijo William. Antes de eso, el P. Muñiz trabajó como gerente general de LANICA Airlines, en Miami, y antes de eso trabajo en Pan American Airlines, en su natal Nicaragua.
"Simplemente decidió hacer más el trabajo de Dios, en lugar de la carrera de ratas", dijo Muñiz, quien a menudo servía en el altar cuando su padre celebraba la Misa y lo acompañaba a las entregas de comida y juguetes para los pobres.
"Era alguien que quería ayudar siempre a los pobres", dijo Muñiz. "Estableció una clínica en Nicaragua para la gente de bajos ingresos. Estableció misiones a lo largo de la costa de Bluefields en Nicaragua. Era muy (bueno) difundiendo la misión del Señor y la presencia de Dios".
Después del masivo terremoto de 1972 en Nicaragua, el P. Muñiz dio comida y refugio a "cientos de familias" en el patio de su casa, según una breve historia recopilada por su otro hijo, Allen Muñiz. Por sus esfuerzos, el P. Muñiz fue entrevistado por Good Morning America y la revista Time.
En Nicaragua, el P. Muñiz también fundó un centro de rehabilitación para adictos a las drogas y al alcohol, al que llamó St. Luke's. Décadas más tarde, en Miami, trabajó como director de servicios ambulatorios en St. Luke's, un centro similar operado por Caridades Católicas.
"Era muy activo y muy dedicado", dijo su hijo William, recordando que su vida familiar, junto con el ministerio de su padre, era "un esfuerzo de equipo" con su madre, Olga. "Era hermoso".
"Siempre era positivo y siempre trataba de hacer feliz a todo el mundo y de romper el hielo", recordó Muñiz. "Creo que era un granuja en ese sentido. Siempre hacía que la gente se sintiera cómoda".
Destacó que su padre tenía un don para hacer que las personas se sintieran que pertenecían a la iglesia, hasta el punto en que no sólo asistías a Misa, sino que se involucraban en varios ministerios.
"Esa fue la parte gratificante de la congregación misma, sentir que eran parte de la misión", dijo Muñiz.
El P. Muñiz nació en Nicaragua el 23 de junio de 1935, fue uno de siete hermanos. Asistió a la Universidad Lee, una universidad cristiana privada en Cleveland, Tennessee, y fue ordenado como ministro evangélico. A su regreso a Nicaragua conoció y se casó con Olga y comenzó a trabajar con las aerolíneas.
Mientras vivía en Miami a principios de los años 70, conoció al Obispo Episcopal de la Diócesis de Nicaragua, quien le ofreció una beca completa para asistir al Seminario Teológico Episcopal del Caribe, en Puerto Rico. Se graduó con una maestría en psicología y fue ordenado para la Iglesia Episcopal de Nicaragua. Allí fundó la Iglesia Episcopal de Todos los Santos, en Managua.
La familia dejó Nicaragua en 1979 y se mudó a Sewanee, Tennessee, donde el P. Muñiz asistió a la Universidad del Sur. También asistió a la Universidad de Vanderbilt, en Nashville, donde obtuvo un doctorado en Teología.
Después se fueron a Texas, donde trabajó para la Diócesis Episcopal de Río Grande, en Nuevo México y el suroeste de Texas. Fundó más misiones en Dallas y El Paso antes de decidirse a buscar la ordenación en la Iglesia Católica.
Eso lo trajo al sur de la Florida, donde fue ordenado el 28 de mayo de 1994. Sirvió como vicario parroquial en Our Lady Queen of Martyrs, en Fort Lauderdale, desde 1994 hasta 2000 y también sirvió en el Apostolado del Mar (ministerio para los marinos) en Port Everglades. De 2000 a 2006, sirvió como vicario parroquial enSt. Helen, en Fort Lauderdale.
Se retiró del sacerdocio en marzo de 2012, pero continuó ayudando en St. Henry y en otras parroquias del condado de Broward.
Al P. Muñiz le sobreviven su esposa Olga, sus hijos William, Allen y Richard, su hermana Violeta Muñiz Castillo y cinco nietos.
El Arzobispo Thomas Wenski presidió la misa fúnebre el 7 de agosto de 2020 en la iglesia St. Henry. Inmediatamente siguió el sepelio en el cementerio Our Lady Queen of Heaven en North Lauderdale.
