Adviento y nuevos comienzos
Monday, November 29, 2010
*Cheryl Whapham
Fotógrafo: COURTESY PHOTO
La clase de ministerios laicos en inglés se ve aquí despues de un retiro en noviembre.
Adviento. Un nuevo comienzo. El inicio de un nuevo año litúrgico en la Iglesia Católica. Es el tiempo en que las historias de las Escrituras comienzan con la proclamación de Juan el Bautista, anunciando la venida de alguien más poderoso que él... y de un niño nacido en un pesebre, y tres hombres que llegan de Oriente para rendirle homenaje.
Es un maravilloso inicio para nuestra jornada de fe, y tenemos la bendición de que cada año la Iglesia nos regala estas semanas para recordar cuán importante es este comienzo para nosotros. Estas son las raíces de nuestra tradición de fe.
Hace poco tuve el placer de presenciar el nuevo comienzo de unas personas en sus propias jornadas de fe. La Escuela Arquidiocesana de Ministerio comenzó el 15 de septiembre, y este verano la cosecha fue abundante: más de 200 adultos decidieron que era el momento para un nuevo comienzo y se atrevieron a permitir que sus ojos se abrieran otra vez a las hermosas enseñanzas de la Iglesia Católica. Se unieron a 150 discípulos que en el otoño de 2009 iniciaron la jornada de dos años. Estas personas vienen de todos los condados de la Arquidiócesis; aprenden en inglés, español y creole, pero hablan más idiomas y representan 69 parroquias distintas.
Lo que más me inspira humildad es que son como ustedes y como yo. Son padres y madres, hijos e hijas, y tienen muchas obligaciones familiares. Tienen trabajos y participan en todo tipo de profesiones: amas de casa, ingenieros, técnicos de aire acondicionado, médicos, administradores de empresas, abogados, técnicos de computadoras, vendedores, jardineros, maestros, asistentes de vuelo, empleados de hoteles, y otros. Han experimentado el éxito personal y la tragedia.
Son personas ocupadas pero han decidido que la prioridad es crecer en su fe y en su amor por Cristo y Su Iglesia. Al servir a sus comunidades parroquiales, desean compartir los dones y los talentos que Dios les ha dado. Para lograrlo, desean aprender más sobre la Iglesia Católica, su doctrina, sus enseñanzas, con el fin de ser ministros auténticos de Cristo.
El Adviento es una buena época para reflexionar sobre nuestra vida espiritual en preparación para el Emmanuel — “Dios con nosotros” — en la Navidad. Como también es el comienzo del año litúrgico, es un tiempo apropiado para dar inicio a algunas prácticas que enriquecen el terreno fértil que Dios ha colocado en cada uno de nosotros. Este año, la Conferencia de los Obispos Católicos de los Estados Unidos lo ha hecho fácil para nosotros.
Tienen numerosos recursos para el Adviento y la Navidad, entre ellos un libro del Papa Benedicto XVI para la oración personal, el que puede ser descargado libre de costo. El libro contiene una cita bíblica y una reflexión para cada día durante el Adviento y la Navidad. Quizás podamos utilizarlo como un nuevo inicio para preparar nuestros corazones para recibir a Cristo en la Navidad. Visite http://www.usccb.org/advent.
Fotógrafo: COURTESY PHOTO
La clase de ministerios laicos de St. Brendan en español se ve aquí despues de un retiro en octubre.
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