Súplica urgente del Papa Francisco por el planeta Tierra
Monday, November 6, 2023
Tony Magliano
Al reflexionar sobre el agravamiento de la crisis del cambio climático en los ocho años transcurridos desde que escribió su carta encíclica sobre el medio ambiente Laudato Si', sobre la importancia urgente de cuidar nuestra casa común, la Tierra, el Papa Francisco lamenta: "Advierto que no tenemos reacciones suficientes mientras el mundo que nos acoge se va desmoronando y quizás acercándose a un punto de quiebre".
Y así, en lugar de darse razonablemente por vencido debido a la frustración, y decirse a sí mismo: "He hecho todo lo que podía hacer. Los líderes gubernamentales, los directores ejecutivos de las empresas, y la mayoría de la gente no escuchan —no me escuchan a mí, no escuchan a nuestra tierra herida, no escuchan a las masas sufrientes de la humanidad, y no escuchan al Creador"—, nuestro indoblegable Papa Francisco pone la pluma sobre el papel y escribe una audaz continuación de su anterior encíclica sobre el medio ambiente, titulándola esta vez Laudate Deum ("Alaben a Dios"), dirigida "a todas las personas de buena voluntad sobre la crisis climática".
Publicada a propósito el 4 de octubre, día de San Francisco de Asís, patrón de la ecología, Laudate Deum nos desafía a todos con audacia, incluso con contundencia, a salir de nuestra zona de comodidad para realizar los cambios gubernamentales, corporativos, eclesiales e individuales necesarios para salvar de una ruina catastrófica a la Tierra, a los vulnerables, y a las generaciones futuras.
Al desafiar de forma clara la postura de quienes niegan el cambio climático, el Papa Francisco escribe: "Por más que se pretendan negar, esconder, disimular o relativizar, los signos del cambio climático están ahí, cada vez más patentes. Nadie puede ignorar que en los últimos años hemos sido testigos de fenómenos extremos, períodos frecuentes de calor inusual, sequía y otros quejidos de la tierra que son sólo algunas expresiones palpables de una enfermedad silenciosa que nos afecta a todos".
Algunos acusan al Santo Padre de hablar fuera del ámbito de su autoridad espiritual, al argumentar que no es climatólogo. Este tipo de objeción no es más que una maniobra para distraernos de las pruebas científicas objetivas de que el sumamente acelerado cambio climático moderno es real, y obedece en su inmensa mayoría a la actividad humana, principalmente a la quema de los combustibles fósiles de carbón, gas y petróleo (visiten la página web de la NASA: "¿Cómo sabemos que el cambio climático es real?", https://climate.nasa.gov/en-espanol/datos/evidencia/).
Para respaldar el hecho de que el Pontífice ha hecho sus tareas científicas, el físico italiano Giorgio Parisi, ganador del Premio Nobel de Física en 2021, dijo que es significativo que el Papa Francisco comience esta exhortación apostólica con "una sorprendente lista de hechos científicos".
El Papa Francisco continúa el desafío profético de Laudate Deum al defender a los pobres y a las naciones pobres, que son los que menos han contribuido al cambio climático y a su consiguiente calentamiento global, pero que más han sufrido por el elevado uso de petróleo, gas y carbón por parte de las naciones industrializadas más ricas.
Escribe que "la realidad es que un bajo porcentaje más rico del planeta contamina más que el 50% más pobre de toda la población mundial, y que la emisión per cápita de los países más ricos es muchas veces mayor que la de los más pobres. ¿Cómo olvidar que África, que alberga más de la mitad de los más pobres del planeta, es responsable de una mínima parte de las emisiones históricas?"
"La transición que se necesita, hacia energías limpias como la eólica y la solar, abandonando los combustibles fósiles, no tiene la velocidad necesaria", advierte el Papa.
Espero que esta breve columna haya estimulado su deseo de leer la profética exhortación apostólica del Santo Padre Laudate Deum("Alaben a Dios") ¡Les inspirará y motivará! Este es el enlace: https://bit.ly/PapaFrancisco-LaudateDeum-esp.
Desde el primer libro de Génesis en la Biblia hasta la Laudate Deum ("Alaben a Dios") del Papa Francisco, está muy claro que Dios tiene un plan maravilloso para la humanidad y toda la creación. Pero cuando pensamos y actuamos de forma contraria al plan del Creador, tarde o temprano atraemos sobre nosotros la tristeza, e incluso la catástrofe.
El Santo Padre concluye su exhortación apostólica con esta llamada de atención: "'Alaben a Dios' es el nombre de esta carta. Porque un ser humano que pretende ocupar el lugar de Dios se convierte en el peor peligro para sí mismo".
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