'Esto me hace sentir orgullosa de ser cat�lica'

By Tom Tracy - Florida Catholic

MIAMI | Christine Desiree se había resignado a hacer otro viaje al otro lado de la ciudad para recoger calcetines para su hijo, un estudiante de octavo grado de la escuela Archbishop Curley Notre Dame Preparatory (ACND), antes del 22 de agosto, fecha de inicio de la escuela.

Sin embargo, las cajas de regalo con uniformes nuevos para los estudiantes de nivel medio y secundario de la escuela arquidiocesana incluían seis pares de calcetines, junto con pantalones, dos camisetas, un suéter y otros artículos — todos proporcionados por la generosidad de los católicos locales.

“Esto me hace sentir orgullosa de ser católica, porque el año pasado terminamos gastando más de $200 en uniformes solamente, y sabes que cuanto más grandes son [los niños], más cuesta la ropa”, dijo Desiree, una católica que creció en la escuela y parroquia Catedral St. Mary de Miami.

Desiree y su hijo, Kobe Desiree, estuvieron entre las 270 familias de estudiantes de ACND que acudieron el 16 de agosto a la distribución de uniformes, proporcionados por los donantes locales. “Esto lo hizo todo más fácil, y fue una bendición para los niños”, dijo la madre de familia. “Sé que no soy la única madre que siente que puede usar el dinero extra para pagar la matrícula y para ayudar a mi hijo en cuanto a su educación se refiere”.

El personal de las Oficinas de Desarrollo y de las Escuelas de la Arquidiócesis de Miami determinó que la provisión de uniformes escolares a los estudiantes de Curley Notre Dame era una prioridad y una necesidad, por lo que utilizaron los fondos recaudados en la gala de recaudación de fondos de octubre del 2013, para ayudar a satisfacer esa necesidad.

La mayoría de los estudiantes de ACND reciben algún tipo de ayuda financiera. Artículos como uniformes y otros accesorios pueden representar dificultades financieras adicionales para familias necesitadas.

“En el 2013, la Arquidiócesis de Miami celebró una Gala por su 55 Aniversario, ‘Una Iglesia para los Pobres’, donde recaudamos fondos, por medio de la generosidad de nuestra comunidad católica, para los programas de proyección social dentro de la Arquidiócesis de Miami”, dijo la directora de Desarrollo de la Arquidiócesis, Katie Blanco.

Blanco añadió que numerosos programas de proyección social han sido apoyados con esos fondos, incluyendo suministros escolares que fueron distribuidos el año pasado entre los estudiantes de las seis parroquias más pobres.

Pequeñas cosas ordinarias
“La necesidad es siempre superior a los recursos disponibles; sin embargo, es un hermoso testimonio de nuestra fe, cuando podemos unirnos para ayudar a los necesitados”, dijo Blanco. “Como dice el Papa Francisco, debemos ayudarnos los unos a los otros con pequeñas cosas ordinarias”.

“Claramente, la vida de los estudiantes de ACND y sus familias fueron impactadas gracias a la generosidad de nuestra comunidad católica”, agregó Blanco.

A Trisha Bruno, una madre de familia que dijo haber crecido asistiendo a las escuelas públicas, le gusta la idea del uniforme escolar para su hijo, un estudiante de 12º grado de ACND.

“Creo que si lo dejamos a su criterio, volvería locos a todos en la Arquidiócesis”, dijo Bruno riéndose. “Él es un chico muy colorido, nada le combina. Su hermano fue a la escuela de arte; cada uno se vestía por su cuenta, así que prefiero un uniforme para mi hijo. Trato de inculcarle un poco de disciplina en su mente de pensamiento libre”.

La madre de familia Denise Lorenzo, que tiene un hijo en el 10º grado en ACND, dijo que el programa de entrega de uniformes será muy beneficioso para muchas familias aquí.

“Gasto alrededor de $300 cuando ordeno todo —esto es lo suficiente como para que le dure toda la escuela, y si tengo suerte algunos [uniformes] durarán otro año más”, dijo Lorenzo, agregando que las familias tendrán que proporcionar el calzado adecuado.

“Realmente, no quisiera estar en una escuela donde todos son diferentes”, añadió, porque en las escuelas que no requieren uniformes “los niños van a ser niños y van a venir a la escuela con lo que quieran ponerse”.

Prepararlos para el éxito
Douglas Romanik, director de la escuela ACND y de su desarrollo, fue el encargado de ayudar a coordinar la distribución de los uniformes. Dijo que preparar a los niños para el éxito incluye permitirles el lucir profesionales con ropa que les haga sentir profesionales.

Tomaron las medidas a los estudiantes para sus nuevos uniformes en junio, a finales del año escolar pasado, dijo Romanik, quien ha trabajado en ACND durante 11 años.

“La compra de extras como materiales escolares y especialmente ropa es, sin duda, una de los gastos más difíciles para las familias; y a medida que los niños crecen, se tiene que comprar ropa nueva”, dijo. “Es muy satisfactorio y gratificante poder proporcionar uniformes para cada familia, con la ayuda de la Arquidiócesis”.

Romanik agregó que hay una buena razón para requerir el uso de uniformes. “Cuanto más los estudiantes tengan un aspecto profesional, más caracterizamos a la escuela como una escuela católica de calidad”, dijo. “Los estudiantes que se visten profesionalmente, actúan profesionalmente, se sienten bien consigo mismos y eso propicia su éxito”.