¿Qué hace la arquidiócesis?
Monday, June 25, 2012
Rosemarie Banich
Las sesiones de opinión del Sínodo se encuentran en marcha, y la respuesta a la invitación del arzobispo Thomas Wenski para compartir nuestras dichas, preocupaciones y sueños para la iglesia local ha sido extraordinaria. Pueden ver fotografías de las primeras sesiones de opinión aquí:
Durante esta etapa del Sínodo, se les solicitó que compartieran su parecer sobre el trabajo de la Arquidiócesis de Miami, y muchos de ustedes han escrito o llamado para preguntar qué es lo que eso quiere decir, exactamente. En otras palabras, ¿cómo se puede distinguir entre el trabajo de nuestra parroquia y el de la Arquidiócesis? ¿Qué hace la Arquidiócesis? Como esto es esencial para entender el propio Sínodo, el blog de esta semana tratará ese asunto.
Como pastor de la Iglesia Católica en el Sur de la Florida, el arzobispo Wenski es responsable de la atención pastoral de más de 1.3 millones de católicos que rinden culto en 104 comunidades parroquiales, y sobre 34,000 estudiantes matriculados en las 62 escuelas católicas en la Arquidiócesis.
La Arquidiócesis está edificada sobre los cimientos de cinco ministerios que definen y guían la labor que emprende. En cada una de estos aspectos del ministerio, la Arquidiócesis trabaja directamente con los fieles como con las parroquias, escuelas y otras entidades, ofreciéndoles su orientación y apoyo.
La Arquidiócesis tiene un interés primordial en la liturgia, como fuente y cumbre de nuestra fe católica. En este aspecto del ministerio, la Arquidiócesis mantiene una Oficina de Culto y Vida Espiritual, cuya trabajo es fomentar el entendimiento y la celebración de la sagrada liturgia, y proveer para la vida espiritual de los fieles.
La educación y la formación son áreas en las que la mayoría de nosotros ha tenido alguna experiencia. La Oficina de Escuelas Católicas supervisa 62 escuelas a través de la Arquidiócesis, mientras que la Oficina de la Catequesis se encarga de servir como un recurso para los directores parroquiales de educación religiosa y los numerosos catequistas voluntarios que sirven en nuestras parroquias. Dentro de esta categoría ministerial también se encuentran la Pastoral Universitaria, la Pastoral Juvenil y la Oficina de Vida Familiar.
Es probable que ya estén familiarizados con los apostolados arquidiocesanos de justicia social y de ayuda, los que utilizan la educación, el apoyo y los servicios directos para encontrar un remedio contra las injusticias. Esto se logra, en parte, a través de Servicios Legales Católicos, Caridades Católicas, la Oficina de Misiones y nuestro Ministerio de Prisiones.
Muchas oficinas sirven a los ministerios de Evangelización y de Vocaciones, incluyendo el Ministerio a los Sacerdotes, el Diaconado, y el de Religiosos y Religiosas. Quienes sirven en estos departamentos tienen la responsabilidad, entre otras, de promover las vocaciones, apoyar a los recién ordenados y a los sacerdotes retirados, y ofrecer oportunidades de formación continuada para los sacerdotes.
Por último, varias oficinas se encargan de dirigir la Arquidiócesis y el ministerio de Mayordomía, entre ellas la Oficina de la Cancillería, el Tribunal, la Fundación de la Comunidad Católica, y la Oficina de Finanzas.
Cuando el Sínodo concluya en el otoño de 2013, la Arquidiócesis de Miami habrá establecido un plan pastoral que abarque estas áreas ministeriales, con prioridades conformes a las voces de los fieles de esta Arquidiócesis.
El blog del Sínodo, "Synod Snapshot," estará en receso una semana más, y se reanudará el 6 de julio. Mientras tanto, si les interesa aprender más sobre los ministerios y los servicios de la Arquidiócesis, pueden visitar www.miamiarch.org. Para más información sobre el Sínodo, pueden visitar nuestro sitio web en www.synodmiami.org. Por favor, continúen recordándonos en sus oraciones.
Comments from readers
Perpetual Adoration should be the goal for every parish but to start small. Awareness of the benefits should be discussed pastorally and inquiries as to the number of people willing to be adorers should be put forth to the parishioners. This will benefit the faithful and the clergy alike. A powerful experience with healer Frank Kelly (in the context of a Mass and/or retreat) would bolster faith (particularly of a key belief in our creed, i.e. the Commuion of Saitns) for the parishioners of Florida's parishes with this experience, as he is authentically gifted with the Word of Knowledge and Prophecy, and Healing. Many are touched in such ways and all have the most intimate of encounters with the Lord through his saints that he normally assigns to the petitioner. More emphasis should be given to Legion of Mary, particularly door-to-door evangelizing and Sacred Heart Enthronements which are sorely needed in South Florida one of the perenially desitute states in terms of the increasingly one-parent, usually single mom family. A new prayer group could be formed called the StMonic-St. Pio prayer group which distributes prayer cards at retreats geared toward Marian consecration. This is a particularly powerful prayer for Reparation and for restoring the family unity, particularly lapsed Catholics (a growing number in most diocess. Contact information at [email protected] for further recommended devotional practices, and a Mass offered for petitioners' intentions.
Hope these are helpful.
Sincerely,
Robert J. Grant
Podr�amos decir que en todos los 4 ministerios, pero tambi�n podremos afirmar que en ninguno. Porque para efectos pr�cticos, la familia laica est� totalmente subordinada en nuestra Iglesia actual al clero no laico.
Por lo que las decisiones del "clero no laico", el cual dirige y monitorea hoy a la Iglesia, no necesariamente van en l�nea con las necesidades de la familia laica, y algunas veces hasta se contradicen.
Cuando particip� en la reuni�n con Mons. Wenski (Our Lady of Lourdes) me di cuenta que mi proposici�n de que la familia fuera el centro y nucleo de la Iglesia, no iba a tener mayor recepcion porque no se identifica con ninguno de los 4 ministerios principales de la Arq. de Miami.
Mi oraci�n al Se�or para que encontremos el lugar primordial de nuestras familias en nuestra Iglesia.