By Cristina Cabrera Jarro -
Fotógrafo: CRISTINA CABRERA JARRO| FC
Los miembros del Coro de niños del Centro Mater cantan "Queremos un corazón feliz", durante la celebración del 20 aniversario del Centro Mater West, el 26 de enero.
HIALEAH GARDENS | El Condado de Miami-Dade tiene más de 1,000 centros de cuidado infantil, pero sólo 80 de ellos están acreditados nacionalmente. Todos los cinco centros Centro Mater Centros de Cuidado Infantil están en esa lista. Bajo el antiguo sistema de calificación de cinco-estrellas Early Learning Coalición (Coalición de Aprendizaje Temprano), los cinco centros Centro Mater también obtuvieron una calificación de cinco estrellas.
Tiene una combinación especial de calidad y dedicación para lograr eso, "la cultura de la excelencia", dijo Ángel Álvarez, director del programa del Centro Mater West.
"Nuestro recurso más importante no es el edificio o los bienes de capital, no son los materiales, no es el equipamiento. Nuestro recurso más importante es nuestro personal, los miembros de nuestro equipo. Y somos capaces de hacer esto, lo que hacemos, esa cultura de la excelencia, por ellos. Ellos hacen que sea posible", dijo Alvarez el 26 de enero, en la celebración del 20 aniversario del Centro Mater West, en Hialeah Gardens.
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Durante la celebración de su 20 aniversario, el 26 de enero, el Centro Mater West tuvo la oportunidad de reconocer a la familia Ortega por su continuo apoyo al centro de cuidado de niños. Desde la izquierda, el Arzobispo Thomas Wenski, María Wollberg, Ana Ortega y J. Abilio Rodríguez, director ejecutivo del Centro Mater Servicios de Cuidado Infantil.
Actualmente, el Centro Mater West cuenta con 204 niños matriculados en su programa, pero en los últimos 20 años, 6,000 niños entre las edades de seis semanas y cinco años de edad han pasado por sus puertas, aprendiendo y beneficiándose de los diferentes servicios que ofrecen, incluyendo una educación bilingüe y conciencia cultural.
La Madre Margarita Miranda Otero, miembro de la Sociedad del Sagrado Corazón en Cuba, estableció el Centro Mater Servicio de Cuidado de Niños, en la Pequeña Habana, en 1968, para servir a los hijos de cubanos exiliados que a menudo tenían dos empleos para llegar a fin de mes. También se dio cuenta de que los niños inmigrantes del Sur de La Florida necesitaban un lugar que les ayude en la transición a la vida en los Estados Unidos, mientras mantenían firmemente sus raíces.
Pero el ambiente tipo- familiar del Centro Mater es lo que es apreciable por los niños y sus familias.
"Cuando llegas aquí, no sientes que estás dejando a tu hijo en una guardería", dijo Vilma Medio, directora de marketing del Palmetto General Hospital. "Sientes que estás dejando a tu hijo en la casa de la abuela. Eso es muy valioso, no tiene precio. Y es por el personal. Es el corazón".
Mientras que los hijos de Medio están ahora en la universidad, ella dijo que aprecia cómo el Centro Mater West los formó y a los otros niños de la comunidad, especialmente a los más necesitados.
"Como directora de marketing (del Palmetto), busco maneras de ayudarlos durante el año", dijo Medio. "Tenemos 1,600 empleados que participan en la campaña anual de Acción de Gracias. Retribuimos a este centro con canastas de Acción de Gracias que van más allá de eso, no sólo por el Día de Acción de Gracias, también por Navidad".
Ahora funcionan bajo el auspicio de Catholic Health Services (Servicios de Salud Católicos), el Centro Mater se ha expandido desde su ubicación original a los centros en Hialeah Gardens y Hialeah. Los centros ahora atienden alrededor de 1,200 niños al año, a partir de las 6 semanas de edad hasta los 12 años, con guardería, educación preescolar y programas de después de la escuela.
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La maestra del Centro Mater West, Olga Roque posa con algunos de sus estudiantes que cantaron en el coro de niños, durante la celebración del 20 aniversario.
Uno de los patrocinadores más ávidos del Centro Mater West fue José "Pepe" Antonio Ortega, el empresario de origen cubano que fundó Sazón Goya Food Company. Ortega dio su tiempo y dinero para muchas instituciones locales, incluyendo el Hospital Mercy, el programa de becas José Martí, y la Liga Contra el Cáncer.
Cuando tuvo la oportunidad de ayudar al Centro Mater, fue por encima y más allá de una contribución monetaria: compró la propiedad del Centro Mater West y su edificio sin terminar, y lo transformó en un refugio seguro para los niños.
"Había una señora que lo llamaba "el filántropo silencioso" porque hizo cosas por el amor de hacerlas y porque le importaba, no por ninguna otra razón", dijo Maria Wollberg, hija de Ortega y miembro de la junta directiva del Centro Mater. "Recuerdo cuando compró este lugar, se puso aquí y comenzó la remodelación. No es tan sólo dar a veces, sino, convertirse en parte de eso dando tiempo y esfuerzo".
Aunque Ortega murió en el 2009, la Fundación Ortega sigue apoyando al Centro Mater.
"Este lugar ha sido tan especial, porque funciona tan bien", dijo Wollberg. "La gente que trabaja aquí es muy dedicada. Ellos hacen un buen trabajo. Es un placer. Es fácil para nosotros".
Para obtener más información sobre el Centro Mater y sus servicios visite: http://centromater.com.
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En la celebración de sus 20 años, el Centro Mater West reconoció el trabajo de algunos de sus empleados fundadores, entre ellos, desde la izquierda: Llisel Viera, Maria B. Guerra, Haydmel Ascunce, Adela Rodríguez, Haydee González, Nilda Castellanos y Olga Roque.
