�Busca una aventura? Viaje con Jes�s

By Ana Rodriguez Soto - Florida Catholic newspaper

KEY WEST | Músculos y tatuajes; hombres en motocicletas que rugen a través de carreteras sinuosas. ¿Puede un campeón mundial de “surf” y cinturón negro ninja sobrenombrado “Bear” (Oso) llevarlos a Jesús?

Éste es el tema de “Long Ride Home” (El Largo Viaje a Casa), una serie distinta de telerrealidad que no se transmite en Spike TV, sino en EWTN. Sí, la red de la Madre Angélica. Los motociclistas tatuados no son exactamente la imagen que la mayoría de la gente tiene del catolicismo.

Precisamente a eso es a lo que apuesta Bear Woznick.

“Queríamos demostrar a los hombres que pueden ser hombres de verdad y amar a Jesús al mismo tiempo”, explicó. “Hay que derribar los muros entre los mismos hombres, y entre los hombres y el Señor”.

Woznick habló con el Florida Catholic y La Voz Católica durante el rodaje de un viaje desde Miami a Key West, que será el eje de la segunda temporada de la serie. Su estrella invitada, por así decirlo, es Mons. Thomas Wenski, el Arzobispo de Miami, que fuma tabacos cubanos y monta una Harley.

“Una vez al día, por un período de ocho días, alguien me comentaba: ‘Tienes que pasear con el Arzobispo’”, recordó Woznick. “No soy tonto; sé cuándo el Espíritu Santo intenta darme una sorpresa”.

Los dos se conectaron finalmente en la Convocatoria de Líderes Católicos que se llevó a cabo del 1o. al 4 de julio en Orlando, y el paseo se realizó un mes después, del 5 al 6 de agosto. La noche antes de su partida hacia Key West, Woznick grabó entrevistas con el Arzobispo en uno de sus lugares preferidos: Cuban Crafters Cigars, en La Pequeña Habana.

“Nos dio un gran regalo al montar con nosotros”, dijo Woznick. “Es fuerte. Es un verdadero motociclista”.

Se refería a las condiciones desfavorables durante el paseo desde la iglesia de Our Lady of Guadalupe, en El Doral —donde el Arzobispo celebró la Misa antes de salir el sábado por la mañana— hasta la Basílica de St. Mary Star of the Sea, en Key West, donde celebró la Misa antes de regresar a Miami en la mañana del domingo.

El sol y la humedad de agosto en La Florida estaban al máximo, con temperaturas en los 90 grados que se sentían como en los 100. Los motociclistas coinciden en que es tolerable si se está en movimiento. Pero el tránsito desde Florida City a Marathon estaba taponado, y el calor del pavimento y el ralentí de las Harleys se dirigían en una sola dirección: hacia los motociclistas, casi todos vestidos con “jeans”, mangas largas y chaquetas de cuero. Por decirlo con delicadeza, se sintió como un purgatorio durante unas 100 millas.

El Arzobispo Wenski llevó a dos compañeros motociclistas: el abogado Tom Equels y Rose Anderson, enfermera de Camillus House. El grupo heterogéneo de Woznick estaba integrado por su prometida, Cindy Davis; “Doc” Lance Maki y Tony Orband, miembros del reparto; los invitados Mike y Kym Schwarze; sus hijos Shane y Joshua Woznick —su equipo de filmación— y la videógrafa Denielle Balint.

Los miembros de Emmaus Bikers, grupo fundado en 2014 en la parroquia de Our Lady of Guadalupe para servir a Dios y a los demás, se unieron desde El Doral hasta su primera parada en St. Justin Martyr, en Key Largo.

“Vamos a dondequiera que nos llamen. Lo que podamos dar, lo hacemos”, indicó Rafael Zuzolo, quien participó en uno de los segmentos grabados junto con su compañero motociclista, Juan Carlos Ramírez.

Aparte de refrescos y meriendas, la parada en St. Justin les brindó un oasis frondoso: un jardín de oración donde los hombres y el Arzobispo discutieron las siete virtudes, tema de la segunda temporada de “Long Ride Home”, que comenzará a transmitirse en EWTN en marzo de 2018.

Woznick y su equipo grabaron su primer viaje en octubre de 2016. La serie de 10 episodios terminó de transmitirse este mes, con repeticiones en septiembre y diciembre (también está disponible en DVD). El desierto de Big Bend Country, en Texas, proporcionó la base para la primera temporada, un escenario bíblico para reflexionar sobre el significado de la vida, la muerte y la fe.

El mismo Woznick se “revirtió”. Es padre de tres hijos y una hija, y se crió en el catolicismo —su padre es diácono—, pero pasó casi una década como un cristiano aconfesional. También trabajó para grandes firmas de contabilidad en “ciudades sin litoral”, según su biografía, “pero no fue hasta que regresó al océano y a la fe de su infancia, que encontró su verdadero hogar”.

Su reversión fue motivada por su amor a la Eucaristía y la lectura de los primeros Padres de la Iglesia, entre ellos Santo Tomás de Aquino, San Agustín y San Justino Mártir. “Una vez comienzas, estás en una pendiente resbaladiza”, aseguró, al señalar que dos ministros bautistas que montaron con él, ahora están en el proceso de convertirse en católicos.

Woznick reside parte del año en Cocoa Beach y el resto en Waikiki Beach, Hawaii. Surfea profesionalmente y enseña tándem surf. Es miembro del elenco de “Clean Break”, en Fox Sports 2 (antes Fuel TV), e incluso apareció en un episodio de Hawaii Five-O. Fundó el ministerio Deep Adventure y es autor de dos libros: Deep Adventure: The Way of Heroic Virtue (“Aventura Profunda: El Camino de la Virtud Heroica”) y Deep in the Wave: A Surfing Guide to the Soul (“En lo más hondo de la ola: Una guía de surf para el alma”).

Le dice a quienes quieren unirse a su “banda” que pasen al menos una hora diaria en oración.

El mensaje de su programa para los hombres: “Amigo, deja de huir. Jesús está a la caza. El Espíritu Santo viene por ti. Él te ama. No te va a dejar escapar”.

Así que, si desea ser un hombre “de verdad”, salvaje y libre y feliz, preste atención al consejo de este motociclista-surfista-aventurero tatuado: “Hacer la voluntad de Dios es lo más gratificante y emocionante y aventurero y radical que puedes hacer en toda tu vida”, aseguró Woznick.

“No importa quién seas, entrégate a Jesús y prepárate para la aventura de tu vida”.