Blog Published

Blog_143199119700_S


Fotógrafo:

Muchas personas no se acercan a comulgar. Esto fue bien evidente para mí el Miércoles de Ceniza, cuando nuestro Señor tiene hambre de nosotros. Obviamente, el poder comulgar es algo serio que merece que nosotros estemos en estado de gracia y hayamos acudido al Sacramento de la Reconciliación. Por eso tenemos la Cuaresma, para poder poner todo en orden y regresar al altar del Señor.

Como párroco, me da gran alegría ver que la iglesia se llena para la cena Eucarística. Pero me da mucha más alegría cuando todos participan en la cena. Este es el momento de la reconciliación.

Todos los sábados, entre 4:30 y 5:30 p.m., mi asistente y yo los esperamos en los confesionarios de la capilla. Sí, parece poco tiempo. Pero la realidad es que solamente se aparecen entre 15-20 personas todas las semanas. Gracias al carácter penitencial de la Cuaresma, este número va creciendo, y por eso nos hemos dedicado a estar los dos presentes para oír sus confesiones.

Las confesiones el sábado nos ayudan a hacer un buen examen de conciencia e ir a confesarnos tranquilos sin tener el “corre-corre†de tratar de hacer una confesión apurada el domingo. Si no pueden venir el sábado, llamen a la oficina entre semana para hacer una cita y con mucho gusto los recibiremos.

Durante este tiempo de Cuaresma, la mayoría de las parroquias auspician misiones cuaresmales, durante las cuales los sacerdotes que las predican se dedican a escuchar confesiones diariamente, por las mañanas y por las tardes. También la Arquidiócesis de Miami auspicia un Fin de Semana de Reconciliación cada año el viernes y sábado antes del Domingo de Ramos. Durante este fin de semana, más de 30 parroquias traen a sacerdotes adicionales para escuchar confesiones la noche del viernes y la mayor parte del sábado.

Hermanos y hermanas, el Cuerpo de Cristo sufre cuando uno de sus miembros no está en comunión con la Santa Madre Iglesia. Si no estás comulgando por otro motivo (por divorcio y segundo matrimonio o por otras razones) no tengas pena y visita a un sacerdote. Esta es la invitación Cuaresmal que Cristo nos hace y el compromiso que hicimos de arrepentirnos de nuestros pecados cuando nos impusieron las cenizas al empezar la Cuaresma.

Los esperamos en el confesionario. 

Este blog fue adaptado del mensaje semanal que el P. Alvarez le escribe a sus parroquianos.

Comments from readers

Susy Del Riego - 04/09/2014 11:10 AM
The peace of mind and soul which this sacrament gives us is one for which there is no substitute. It is a peace that comes from a certainty, rather than from an unsure hope, that our sins have been forgiven and that we are right with God.
Gloria U. Carreras - 04/07/2014 02:14 PM
Muchas gracias Padre Manny por recordarnos lo importante de la invitaci�n a la cena del Se�or y dela preparaci�n necesaria para acercarnos a recibir la Eucarist�a. Nuestro grupo de San Gregorio siempre lo recuerda enoraci�n.

Powered by Parish Mate | E-system

This site is protected by reCAPTCHA and the Google Privacy Policy and Terms of Service apply