Rap, música, videos y castidad

By Jim Davis - Florida Catholic

Photography: JIM DAVIS | FC

PEMBROKE PINES | El estruendo de la música pop, con el bajo en alto, asaltó los oídos de los más de 1,900 asistentes mientras se sentaban en sus asientos. Pero a nadie le importaba: todos eran adolescentes.

Durante dos horas, recibieron más música, además de videos, canciones, vítores escolares —y charlas importantes sobre la necesidad de esperar hasta el matrimonio para tener relaciones sexuales. La inusual mezcla de fiesta y educación moral es la cara del encuentro anual arquidiocesano, conocido como el Día de la Castidad, que se celebra el 28 de febrero, y cuyo objetivo es presentar la enseñanza de una manera positiva, según la coordinadora Sandi Le Bel.

“Parece que el catolicismo se ha convertido en un montón de reglas”, dijo Le Bel, coordinadora de educación de la Oficina arquidiocesana de Respeto a la Vida. “Queríamos ir mucho más allá, para mostrar que el plan de Dios es algo bueno, algo hermoso. No es para quitarles la felicidad a los niños. Es para darles felicidad”.

La Oficina de Respeto a la Vida patrocinó el encuentro, con la ayuda del Consejo arquidiocesano de Mujeres Católicas de Miami. Llevaron estudiantes de 8º grado de 41 escuelas católicas al Charles Dodge County Center.

Fue la primera vez que el Día de la Castidad reunió a una multitud tan grande. Normalmente se ha celebrado en cuatro reuniones de 500-600 participantes cada una.

Después de terminar el preámbulo con la canción pop “Happy” de Pharrell, se les presentó a los niños un video de deportes extremos, con estudiantes de karate, motociclistas de BMX en senderos de montaña, paracaidistas saltando de aviones y un surfista dentro del rizo de una ola. “People Are Awesome!” (¡La gente es maravillosa!) mostró la imagen final. Álvaro Vega, cuyo nombre artístico es Communion, cantó dos raps y guió a los oyentes en una ovación a Jesús, así como su canción “Madre María”.

 

“Dios también es divertido”

Durante un descanso, los organizadores del Día de la Castidad lanzaron regalos al público, incluyendo camisetas y pulseras pro vida. Gerard John, ministro de los jóvenes en la parroquia St. Bartholomew, en Miramar, dirigió a la multitud con un canto receptivo: “¡Dios es bueno todo el tiempo! — ¡todo el tiempo Dios es bueno!”.

“Eso es sólo para que sepas que Dios también es divertido”, dijo John.

Sin embargo, incluso los juegos divertidos tenían un mensaje. Vega, un feligrés de St. Bonaventure, en Davie, contó cómo trató de llegar a ser un rapero secular, y luego dejó el negocio cuando dio su vida a Jesús. “Siempre es importante poner a Dios primero en tu vida”, dijo.

Cuando se le pregunto después, por qué no mencionó la castidad, el tema del día, Vega dijo que el compromiso es lo primero. “La castidad sin Jesucristo es sólo fuerza de voluntad. Él nos da la gracia de vivir en pureza”.

John también se puso serio, mostrando videos sobre los problemas de los adolescentes: el miedo a no ser atractivo, el impulso para acoplarse bebiendo alcohol y fumando marihuana. John dijo que trabaja para un centro de tratamiento de drogas para adultos con 92 camas — “y está lleno todos los días”.

“Estamos atrapados entre la voz del mundo y la voz de la verdad”, continuó. “La pureza y la castidad son autocontrol. Dios no prometió que sería fácil. Pero prometió que siempre estaría contigo”.

Mari Pablo, ministra del campus de la Escuela Secundaria St. Brendan, en Miami, destacó el modelo de hombres y mujeres como diferentes pero iguales, un modelo establecido por San Juan Pablo II en su Teología del Cuerpo. Criticó la sexualidad moderna como superficial, centrada más en sí misma que en las relaciones. “Tú eres un regalo. Tú tienes un propósito. Fuiste creado para más. Por favor, no te conformes”.

 

Luego gritaron

Si la música y los videos eran la zanahoria, la radióloga Grazie Christie sacó el garrote: las enfermedades de transmisión sexual acechan a los que se entregan al sexo casual.

Los estudiantes se asombraron ante una tabla que mostraba que el Sur de La Florida tiene una de las tasas más altas de infección por VIH, Sida. Se quedaron boquiabiertos al ver una foto de una boca abierta llena de gonorrea. Y gritaron al ver una foto con verrugas en los labios de un paciente con herpes.

“Eso no es nada comparado con cómo se ve en el área genital”, dijo la Dra. Christie.

Las niñas volvieron a gritar un poco más tarde —esta vez de entusiasmo— mientras Gus De La Fe se arrodillaba ante Caitlin, su esposa, para mostrar cómo se le había declarado hace siete meses. Ellos contaron cómo creció su relación: primero una atracción en 8º grado, luego una amistad, luego el romance, luego el matrimonio en julio pasado. También se decidieron muy pronto por una familia —ella ya está embarazada.

Incluso hay castidad durante el matrimonio, dijeron los De La Fe, ambos ministros laicos en la iglesia St. Mark, en Southwest Ranches. “Podemos canalizar nuestros deseos y amor en más de una forma”, dijo Gus. “No sentimos lujuria ni nos usamos el uno al otro. Nos entregamos fiel y verdaderamente”.

Caitlin alentó a los oyentes que ya han tenido relaciones sexuales. “Nunca es demasiado tarde. Puedes confesarte y empezar de nuevo”.

Durante las entrevistas posteriores, algunos estudiantes demostraron que el encuentro no era sólo bromas y videos. Salieron marcados por los mensajes.

 

Hablan los estudiantes

“Antes pensaba que [la castidad] se trataba sólo de no tener sexo”, dijo Stephanie Giménez, de la escuela St. Bonaventure. “Ahora veo que va más allá”.

Nicholas Forte, de la escuela Immaculate Conception, en Hialeah, quedó impresionado por el testimonio de los De La Fe, y cómo su amor creció a través de los años. “Mostró la importancia de una relación — lo que significa y cómo mantenerla”.

Al finalizar el Día de la Castidad, la anfitriona, Natalie Chaise, habló de las tarjetas de compromiso en camino a las escuelas. Les pidió a los adolescentes que oraran por la decisión de castidad, y que luego firmaran las tarjetas cuando estuvieran listos. “Aférrate a la tarjeta, y aférrate a tu castidad”, dijo ella.

Le Bel dijo que se mide el éxito del día con las respuestas de las tarjetas que llenan los maestros y los estudiantes. Dijo que el índice de respuesta es de alrededor del 20 por ciento cada año. Los comentarios de años anteriores han sido en gran medida positivos. Entre ellos: “Me ayudó a ver la castidad y su importancia”; y “creo que todos los estudiantes deberían asistir a esta charla. Tú también me acercas a Dios”.